Siempre tomaba la primera palabra, y mas allá de querer ser quien yo quería, el era mas de lo que podría soportar. llega un punto en que la verdad se vuelve fundamental y cundo la verdad es uni-pesonal, creo que se vuelve egoísta, por eso lo perdió, me perdiste.
Aquí mientras el sur trae sus linos de viento que se vuelven efusos e inmaculados de magia, siento que ya fue el día en que tenia que estar ahí, ahí donde el me dejo y me tiro la llave de la vida con la cual mi ceguera se hizo mas firme y no quiso ver la luz, decidió no ver la luz.
Me quede aquí y no dije nada, me deje llevar y no fui capaz de frenar, un mundo, dos mundos, y se llenaron de bacterias se infectaron, y conmigo la lepra se fue a un hogar que se hacia llamar paraíso.
Te miraba de lejos y tu luz, tus ojos empastados en ocre y ese pelo que alisabas con facilidad me decían que tenias algo dentro que no estaba bien, eres demasiado hermoso para escribir sobre como eres tu, pero nunca hablaste, nunca me dijiste que pasaba dentro de ti, dentro de lo que llena tu vida, amor, hay ojos celestiales dime que hacer para poder llevar esta cruz, para no llorar y de vez en cuando correr a tu encuentro.-
(Víctor Castillo)
y sigo en esa oscuridad, ciega de tanta luz que hay delante de mi. Sin alcanzar la llave que tiraste , dime que más es lo que debo hacer. pero dímelo con exactitud. ¿A caso debo seguir con esa interrogante?, tengo dos caminos. pero en uno no estás tú, y prefiero omitirlo. no hagas caso omiso a las palabras que salen de mi boca, deja que penetren en tu mundo. el mundo que tú creaste y que yo estoy dispuesta a cambiar. Cómo me pides que deje de llorar, si es la única manera para desidratar mi pena. ¿Piensas en mi?, pareciera que estas confundido. Amor, tranquilo.
¿que siga?.. seguiré, pero de la mano.-
(Yanina Odette Ferrada)
